¿HAS PENSADO EN UTILIZAR LOS MENSAJES DE TU MÓVIL PARA HACER CRECER TU NEGOCIO?

Imagina que tienes una amiga que es una súper diseñadora de moda y hace los mejores diseños de ropa de tu localidad. Un día ella decide comenzar su propio negocio, “Los diseños de Olalla” por ejemplo, y empieza a vender su diseños  desde su casa. Toma pedidos por mensajes de texto y utiliza un servicio de Delivery Local o de Correos Express para hacer las entregas.

Apenas se corre la voz, el teléfono móvil de Olalla se llena de mensajes, y ella se da cuenta que no puede hacer un seguimiento de tantos pedidos. Y lo que es peor, se está perdiendo mensajes de amigos y de familia. Conclusión: necesita organizar todos esos mensajes.

La organización es todo un desafío.

Creo que todos estamos de acuerdo con esta afirmación.  Los mensajes son una excelente forma de comunicarse con los clientes, pero mantener conversaciones uno a uno con ellos y al mismo tiempo con tus propios contactos personales es bastante complicado, sobre todo cuando el volumen de clientes es elevado.

Vamos a descubrir cómo hacer que gestionar estos mensajes sea más fácil y manejable.

Lo cierto es que los mensajes son una forma excepcional de generar una relación personal con los clientes y de hacer que una empresa empiece a crecer, pero no siempre es el método más eficiente.

A medida que “Los diseños de Olalla” crezcan, a ella se le va a hacer muy difícil procesar tantos mensajes. Contratar a más personal puede ser la solución, pero también puede afectar a la rentabilidad a largo plazo de su negocio.

Afortunadamente los ordenadores y las aplicaciones pueden ayudar a Olalla a gestionar más información de la que podría su propio cerebro, porque todos tenemos un límite.

Esto ayudará a que pueda vender más y a tener más clientes contentos y satisfechos.

¿Cómo pasas de enviar mensajes manualmente a usar un sistema más eficiente y que genere más ventas? Y ¿cómo lo haces sin sacrificar la sensación de cercanía que has creado con los clientes respondiéndoles uno a uno?

Lo primero que debes hacer es crear una base de datos con todos tus clientes.

Toma nota de quién compró, qué compró, cuándo lo hizo y cuánto gastó, además debes registrar la información demográfica como edad, género y ubicación. Para ello puedes crear una hoja de cálculo con la información de tus clientes y completarla de forma manual, o puedes utilizar un programa de gestión de relaciones con clientes, como por ejemplo CustomerRelationship Management o un CRM como Infusionsoft (Keap)  para sistematizar la información.

Existen diferentes servicios de CRM que te permiten almacenar esa información y hacer un seguimiento a tus clientes reales, a tus clientes potenciales y a toda persona con la que tu empresa haga negocios.

Los sistemas de CRM ofrecen distintos niveles de complejidad y por lo tanto, distintas herramientas para analizar la información y comunicarte con tus clientes. Además de todo esto, te dan la ventaja de mantener los datos en un solo lugar, permitiendo que hagamos búsquedas y segmentaciones de una forma sencilla.

Por ejemplo, una vez que hayas determinado quién son los clientes que viven en una ciudad en concreto o que compran un producto en especial, podrás dividirlos en grupos para enviarles determinados mensajes o promociones.

Es decir, Olalla podría enviar mensajes a todos los clientes que compraron su última colección para preguntarles si les gustó o para agradecer la fidelidad de sus clientes más habituales.

¿Cuál es la clave para vender y para comunicarte con tus clientes a través de mensajes?

La clave es llegar al cliente correcto, con el mensaje correcto en el momento adecuado.

Para conseguir esto es fundamental ordenar toda esa información de la que hablábamos, y mantenerla actualizada.

También es importante permitir a los clientes usar su método de pago preferido. Para ello debes investigar cuáles son los medios de pago más simples y los más populares en tu mercado. Por ejemplo, podrías implementar un sistema de pago en efectivo en el momento de la entrega, o un sistema de pago vía móvil.

En cualquier caso es muy importante que evites todos los obstáculos que bloqueen la transacción final, en definitiva, no pierdas ventas por no tener las modalidades de pago adecuadas a tus clientes.

Por ejemplo, hay países en los que no funciona Paypal, si yo me dirijo a ese país no puedo ofrecerles ese método de pago, sería ilógico. No podrían pagar.

También tendrás que procurar encontrar sistemas que faciliten tu operación y que bajen tus costos, como pueden ser los pagos online, y trata de buscar formas de promover ese uso aunque sigas ofreciendo los sistemas tradicionales.

Y para terminar quiero recalcar que, tener un sitio web donde los clientes puedan hacer los pedidos te permitirá mejorar tu negocio y conseguir un gran volumen de ventas.

Nunca me cansaré de decirlo, una web es casi imprescindible.

Tu sitio no tiene porque ser deslumbrante y no necesitas pagar mucho por él. Siempre digo que se encuentra de forma asequible que te hagan una buena página web.

Además el servicio de comercio electrónico que proveen empresas como Shopify, te permite alojar tu propio sitio en la plataforma, fotos e información y además recibir pagos. (Si te interesa crear un Shopify déjame un comentario y te daré un link especial).

Muchas plataformas te permitirán usar un nombre con el dominio personalizado como “losdiseñosdeolalla.com”, pero debes tener en cuenta que algunos servicios son gratuitos y en otros te cobrarán una tarifa según las funciones que solicites o la cantidad de productos que alojes en la plataforma.

Otra opción es vender en plataformas de terceros como hacen muchas influencers, por ejemplo en  Micolet.com .

Ahora ya sabes lo importante que es organizar la información de los clientes con los que te comunicas a través de los mensajes. Así que, organízate y utiliza las aplicaciones que necesites.

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