La polémica como estrategia de marketing
La última campaña de la firma Balenciaga se suma a las Campañas publicitarias con la Polémica como estrategia de Marketing. Y es que hay una gran diferencia entre el marketing polémico y el marketing de Guerrilla.
La apuesta por el marketing de guerrilla.
El marketing de guerrilla busca conseguir sus objetivos a través de técnicas poco convencionales utilizando la creatividad, el ingenio y la innovación sin necesidad de grandes inversiones en medios y espacios publicitarios.
El objetivo principal es crear un impacto o sorpresa en el público objetivo para viralizar la acción. De ese modo es el propio público el que comparte el contenido llegando más fácilmente al público.
Las técnicas más conocidas son cuatro: El Ambient Marketing, el experiential marketing, los conocidos flashmobs y la publicidad encubierta
Para que te hagas una idea te contaré una famosa campaña de Netflix que lanzó en el lanzamiento de la serie “Sex Education”. En las que hicieron una campaña de vallas publicitarias con la frase “Cuenca, te vamos a poner mirando a Netflix”
La moda de los flashmobs, lograron viralizar series como Glee, centros comerciales, escuelas de danza, asociaciones sin ánimo de lucro… todas buscaron ser virales con más o menos éxito.
Campañas de publicidad polémicas, más allá del límite.
Por otra parte están las Campañas Publicitarias Polémicas, que buscan repercusión mediática, incomodando y provocando al público. Juegan con las normas y valores sociales, legales y éticos; y normalmente el buen gusto al forzar la controversia con temas como el sexismo, la desigualdad o el racismo.
Los niños siempre sensibilizan el mensaje por lo que son objetivo de polémica. Como la última campaña de Balenciaga con la que abríamos este artículo.
En la que los niños posan junto a peluches vestidos con arneses de cuero y objetos Bondange, hipersexualizando a la infancia y para más provocación salen junto a una sentencia del Tribunal Supremo de EEUU sobre imágenes indecentes de niños.
Como consecuencia además de disculparse públicamente y discutir sobre la autoría de según que detalles. Han retirado la campaña y los artículos relacionados a esta.
H&M y “El mono más genial de la selva”
Hace algunos años H&M lanzó una campaña infantil que se interpretó como racista. En la que aparecía un niño negro con una sudadera que lucía una frase que traducida significa “El mono mas genial de la selva”.
Y aunque acabó con la retirada de la campaña y una disculpa pública de la marca. Nadie olvida aquella foto que se hizo viral consiguiendo una visibilidad dudosamente merecida
Dove y su transformación racial
En 2017 la compañía emite un spot publicitario por el lanzamiento de un nuevo gel de ducha. En el video se ve como una mujer negra se transforma en una mujer blanca al usar su producto y cambiarse la camiseta. Se le acusó de racismo al insinuar que las razas oscuras son “sucias” o despreciables.
Y aunque también se saldó con una disculpa y la retirada de la campaña, siempre queda en entredicho la inocencia de la torpeza.
Adidas y las piernas de Arvida Byström
En esta campaña Adidas quería presentar una nueva feminidad sin estereotipos de género. Por lo que la protagonista Arvida Byström posaba con sus piernas sin depilar.
A Pesar de las críticas esta campaña no solo no se retiró sino que la modelo ha escogido a otros activistas para su publicidad reivindicando una feminidad sin estereotipo alguno
Perlan recomienda ”Un detergente para cada tipo de mujer”
En España esta campaña fue muy heavy. En la imagen se asociaba diferentes mujeres a cada tipo de detergente.
La respuesta de mujeres y cloectivos no se hizo esperar, e inundaron las redes de críticas hablando de lo sexista que resultaba esta campaña. En la que se insinuaba que las labores domésticas pertenecen a las mujeres.
La sexualidad y las marcas de lujo
Las grandes casas de alta costura como Yves Saint, Dolce Gabbana, o Loewe juegan siempre entre la sensualidad y la sexualidad de la mujer. Lo que les lleva a cruzar los límites del buen gusto con demasiada frecuencia, creando polémicas, disculpas y atención mediática.
Dr Martens y los iconos del Rock
En 2007 la firma de botas militares lanzó una campaña en la que salían cuatro músicos de Rock fallecidos como promoción de su calzado. Calificada de mal gusto por el público provocó el enfado de la viuda de Kurt Cobain al ver esta campaña.
Si bien la compañía alegó que no había solicitado esta campaña y acusó a la agencia de publicidad, al parecer fue un empleado el que aprobó el contenido para una pequeña revista británica de música.
Las campañas polémicas afectan a pequeñas y grandes marcas. Podría citaros infinidad de compañías que han hecho este tipo de campañas para tener más visibilidad.
Afortunadamente la sociedad avanza y está mucho más sensibilizada. Y censuran sin tapujos los mensajes sexistas, racistas o discriminatorios. Lo que por otra parte hace que estos mensajes sean fácilmente virales al concentrar la repulsa de un espectro amplio de la comunidad.
Y aunque podríamos hablar de Nike, Carrefour o Dunkin Donuts. Pero os sorprendería como Liberbank, Mutua Madrileña, la mismísima RAE, incluso alguna campaña gubernamental. Cometen “errores” en los que siempre cabe la duda sobre la intencionalidad de hacer deliberadamente una Campaña Publicitaria Polémica.